Control de malezas y resistencia a herbicidas en el cultivo de arroz

El monocultivo del arroz ha traído la proliferación de malezas que compiten con mucho éxito contra el cultivo, como sabemos las principales malezas en nuestros arrozales son poaceas al igual que el arroz, entre estas tenemos Echinocloa spp, Leptocloa sp e Ischaemun rugosum. Si hacemos una revisión rápida de las principales herramientas con las que contamos para el manejo de malezas en arroz nos encontraremos una característica particular, y es el hecho de que la mayoría de opciones son herbicidas post-emergentes. 

Es por todos conocidos la interferencia que causan las malezas sobre el normal crecimiento del arroz causando daños tales como competencia por espacio, agua y nutrientes, elevando los costos de producción, bajando la calidad y hospedando enfermedades como pyricularia y chinches que después migran al arroz. El control de malezas ocupa entre 6-7% del total de costos de producción en Nicaragua. Según Ampong-Nyarko y De Datta, 1991, lotes con controles deficientes de malezas pueden perder hasta 10% de su rendimiento, esto puede aumentar si los escapes de malezas se vuelven más severos.

Evolución en la resistencia

Las malezas han evolucionado y se han vuelto resistentes a las moléculas herbicidas post emergentes, debido a la presión de selección impuesta por el herbicida sobre las poblaciones. Aún con esto, sabemos que la gran mayoría de productores continúan realizando controles de maleza en post emergencia favoreciendo que se presente resistencia. 

¿Cómo ocurre la resistencia a las malezas?

La resistencia de las malezas nos obliga a un cambio en el método de control, en el mercado se cuenta con herbicidas pre-emergentes (de sello) que no permiten la germinación normal de las plantas y reducen las probabilidades de inducir resistencia. Aunque tenemos desde hace muchos años moléculas pre-emergentes que trabajan a nivel de suelo, no hemos aprovechado su enorme potencial.

Los mejores métodos de control en la actualidad están basados en el uso de pre-emergentes aplicados en dos momentos distintos dentro del ciclo de arroz, lo que actualmente en el campo se conoce como el sello y resello; al utilizar moléculas que tienen las características de pre-emergentes se inhibe la germinación de las malezas  con la finalidad de mantener durante un tiempo prolongado el  efecto en el suelo hasta llegar al establecimiento del cultivo con la lámina de agua sin afectar el cultivo.

Cambio de estrategia de control

La utilización de esta estrategia nos ha permitido lograr controles de maleza a los 12 días después de siembra en etapa fenológica v2-v3, sin la necesidad de labores adicionales. Los controles tradicionales llegan hasta 16-18 días después de la siembra en etapa fenológica v5-v6, sin contar con los escapes de maleza que se extienden hasta los 35-40 días.

El control de malezas debe ser integral en los sistemas agrícolas, es por ello que las estrategias para combatir malezas deben estar basadas en la utilización de nuevas moléculas o productos diferenciados que nos garanticen una mezcla de ingredientes activos capaces de romper resistencia y a la vez dar un control contundente.

¡La mezcla que enamora!

Durante muchos años de experiencia en el mercado Cisa Agro ha buscado la mejor oferta tecnológica para sus clientes, es por ello que hoy contamos con dos productos que nos han permitido alcanzar el óptimo control de malezas en los primeros 15 días del cultivo. 

Eros Gold y Spada 60 WG son dos productos basados en una combinación de moléculas pre-emergentes y post-emergentes tempranos que nos permite limpiar el campo de malezas que han emergido junto al cultivo de arroz, así como también establecer un sello para evitar nuevas generaciones de malezas. La gran ventaja de utilizar esta mezlca radica principalmente en el amplio espectro de control sobre malezas gramíneas, hojas anchas y cyperaceas; dando un control integrado que nos permitirá evitar aplicaciones post emergentes para hojas anchas y posteriormente aplicaciones de rescate.